El miércoles 12 de julio el Sistema Interinstitucional de Control de Cáceles concurrió, sin previo aviso, al Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza en el que se produjo en el último mes y medio un inusual número de suicidios.

La comitiva estuvo integrada por su presidente, el juez Gustavo M. Hornos, el fiscal a cargo de la Procuraduría contra la Violencia Institucional, Fernando Vallone y la coordinadora del área de encierro Bárbara Franco; el defensor público oficial Guillermo Todarello, cotitular de la Comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación, con la asistencia como actuaria de la secretaria del Sistema Lucía Gallagher y el jefe de despacho Nicolás Herbin.

Se inspeccionaron los sectores generalmente más conflictivos del establecimiento, en particular los pabellones destinados al alojamiento de internos que se encuentran bajo el Protocolo de Resguardo de Personas de Especial Vulnerabilidad, aquellos que alojan internos sancionados y aquellos que, por sus características personales y antecedentes se presentan como los más conflictivos y difíciles de alojar en otros sectores del Complejo.

Se comprobaron diferentes circunstancias como la falta de funcionamiento de los inodoros, las canillas, falta de suministro de luz eléctrica y agua en las celdas individuales. También faltaban colchones; condiciones que se sumaban a un régimen de vida de encierro individual al límite. El régimen de vida del sector era de 23 horas de encierro con una hora para salir al patio, hablar por teléfono.

Por estas circunstancias, brevemente detalladas, se consideró que el Pabellón J no estaba en condiciones conforme estándares mínimos de alojamiento y en respeto a la dignidad humana.

Consecuentemente, se requirió el inmediato realojamiento de los cinco internos con las medidas de seguridad que cada uno requiera, previa alimentación y revisión médica y el Director del Complejo se comprometió a finalizar la refacción del sector con el objeto de adecuarlo a condiciones de vida dignas y a no alojar internos hasta tanto el pabellón no estuviera en las condiciones mínimas acordadas.

Las nuevas autoridades del Complejo –asumidas 48horas antes del Monitoreo- el Jefe Fabián Ascona y la Subjefa Sonia Álvarez –por primera vez asume ese cargo una mujer en una cárcel de varones- junto al resto de las autoridades se comprometieron a dar una pronta solución y a informar al Sistema sobre el resultado de los realojamientos y las gestiones específicas del pabellón.

Asimismo, la Comitiva recorrió los pabellones I, J y H del Módulo Residencial IV del Complejo y el sector Educación, en los que se hicieron señalamientos puntuales como atención médica, higiene y mantenimiento. También fueron acompañados por las autoridades del Complejo.

Con el objeto de que los internos accedan a información y entretenimiento, se solicitó que se arbitren los medios necesarios para el ingreso de un televisor y de un horno microondas, los que ya fueron entregados por las autoridades del Complejo.

De esta manera, el Sistema Interinstitucional de Control de Cárceles reafirma su compromiso con las personas privadas de la libertad y el aseguramiento de la vigencia de sus derechos.

Informe: Sistema Interinstitucional de Control de Cárceles.